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Harry, Meghan y Einstein o el budismo y la relatividad

Últimamente Harry y Meghan han atraído mucha atención después de su entrevista con Oprah. Mucha gente los critica. Tengo amigos aristócratas y esta historia me hizo pensar en ellos. También veo una conexión con la teoría de la relatividad de Einstein y con el budismo.


Quiero dejar claro que esto es sólo mi punto de vista personal, y si no te gusta lo que lees, por favor no te enfades conmigo.

Mi antiguo vecino es descendiente de una familia noble. Era director de escuela y venía a menudo a mi casa a comer o a tomar una taza de té. Me dijo que nunca se sintió muy cerca de sus padres. No recordaba que su madre lo tuviera en brazos o en su regazo y su padre nunca le había prestado mucha atención. Por otro lado, se sentía muy unido a su niñera y a los criados. Para él eran su verdadera familia, y le parecía muy divertido que su hermano y su tío estuvieran siempre librando una batalla legal para decidir quién debía llevar el título de conde.

También conocí a un alemán que descendía de una familia noble y que me contó que su padre y su hermana habían tenido depresiones, que la causa era precisamente que pertenecían a la aristocracia europea. Me dijo que si hubiera podido elegir, nunca habría nacido en una familia aristocrática. Su hermana me contó que en la escuela secundaria, si llevaba maquillaje y ropa cara, los demás la llamaban rica. Si estaba triste, los niños decían que lo hacía a propósito para llamar la atención. Si se vestía con normalidad o mostraba simpatía por los demás, siempre había alguien que decía que sólo trataba de hacer amigos o aliados. No importaba lo que hiciera, siempre existían alumnos que se burlaban de ella.

Recuerdo que una vez, mientras paseábamos, mi amigo alemán me enseñó un castillo junto a un lago, y me fijé en que el escudo de la puerta coincidía con el de su familia. Me dijo que sus abuelos vivían allí. Quise tocar el timbre para entrar y visitar el castillo, pero me interrumpió inmediatamente. De hecho, no podía visitar a sus abuelos sin avisar. El protocolo era el siguiente: sus abuelos debían enviar un mensajero con una carta y él debía responderles de la misma manera. Además, las cartas debían estar selladas con el sello de la familia. En ese momento tenía una novia de origen norteafricano y su familia no estaba nada contenta. Así que llevaba mucho tiempo sin ver a sus abuelos.

La historia de Harry y Meghan me hizo pensar en mis amigos aristócratas. Realmente tienen un lado triste que nadie conoce. Hay un dicho chino que dice que aún un buen juez no puede entender y arreglar los problemas familiares. Es muy difícil decir quién tiene razón y quién no. Sobre todo porque la mayoría de los periodistas ya tienen sus prejuicios y, en cualquier caso, cada persona tiene un sentimiento diferente.

En un momento dado, uno puede tener diferentes sentimientos. Mucha gente piensa que el tiempo y el espacio existen realmente y que si se observa un objeto en el mismo momento, cualquier observador verá exactamente lo mismo. En realidad, Einstein ya estableció que el tiempo y el espacio son sólo conceptos porque en realidad varían según el observador y no son absolutos. Si nos expresamos con más precisión, en el mismo espacio, según la fuerza de la gravitación, el tiempo no correrá de la misma manera. Si ponemos un reloj en la planta baja de una torre y otro en su techo no funcionarán a la misma velocidad. No crea que estoy diciendo tonterías: ¡todo esto está científicamente demostrado! En el budismo consideramos las cosas de la misma manera. El boddhisattva Vasubandhu, en su sastra, dice que el tiempo y el espacio juntos constituyen una noción abstracta y no existen realmente. Imagina que, en la misma torre que acabamos de mencionar, dos personas observan los dos relojes y se llaman para intercambiar sobre la hora actual: ¿deben enfadarse entre ellos sólo porque cada reloj muestra una hora diferente?

Pongamos otro ejemplo: todos recordamos que, lamentablemente, la catedral de Notre Dame se quemó hace tiempo. En aquel momento, una televisión de un país conocido acusó a los franceses de no saber apagar un incendio. Según los periodistas, unos cuantos helicópteros habrían bastado para apagar el fuego rápidamente. Una vez que los bomberos franceses apagaron el fuego, el gobierno dijo que las ventanas con vidrieras y los objetos del interior no tenían precio. El uso de helicópteros para arrojar agua sobre la catedral habría destruido, sin duda, todo este tesoro, causando así un daño irreversible. Está claro que, en ese momento, estos periodistas estaban más centrados en la lucha contra las llamas y que los franceses pensaban más en los valiosos tesoros que querían conservar.

Así que tenemos que pensar un poco antes de reaccionar. Es como el famoso físico Boltzmann, que decía que si se rompe un huevo, es imposible volver atrás y recuperar el huevo tal y como era antes. Esto parece evidente, pero tardó años en demostrarlo de manera formal e irrefutable. Así que tenemos que tener mucho cuidado antes de romper los huevos porque después será demasiado tarde: un pequeño error puede crear enormes consecuencias.

AMITOFO.